sábado, 20 de febrero de 2010

TIMIDEZ


¿Sabes? el otro día me encontré con un ex compañero del preuniversitario y me saludó. Me sorprendí tanto. Yo nunca había hablado con él y pensaba que él no sabía que yo existía. ¿Te ha pasado?
Es muy común entre nosotras las tímidas, creer que uno es invisible. Yo cuando llegaba a una clase nunca saludaba a nadie, sólo a mi única amiga. No lo encontraba necesario pues pensaba que nadie posaba sus ojos en mí. Y si algún amigo estaba conversando con otra persona yo ni osaba a acercarme, me decía a mí misma que lo iba a molestar al sacarlo de su conversación y pasaba de largo, sin siquiera hacer un gesto de “Hola” con las cejas.
Después de un tiempo alguien me dijo que me encontraban pesada, creída o desagradable, porque yo no saludaba. Yo jamás me lo imaginé, porque simplemente creía que nadie me veía. Incluso, me acostumbré a caminar con la espalda encorvada y mi bolso bien agarrado por delante, también con mi cuerpo trataba de pasar desapercibida. Hoy lo he superado un poco, y me obligo a saludar a todo el mundo, aunque sea con un gesto de la mano. Pero aún no me es fácil incorporarme a un grupo dónde tengo que llegar a saludar a todos.

(En la página timidez ve algunos consejos que me han servido para ir cambiando)

No hay comentarios: