¡¡LLEGÓ EL CALOR!!!... Que tortura
¡Que felicidad para muchos! Pero para nosotras…todo mal. Primero hay que andar con poca ropa y, obvio, se te marcan los rollos. O bien, todos se van a dar cuenta que tengo unas pechugas gigantes, que es mi caso, o quizás el tuyo sea que tienes muy pocas. Eso me llevó por muchos años a andar de sweater durante el verano…cocinada, cocinada…pero yo siempre digna, cada vez que alguien me preguntaba si tenía calor decía que no, “estoy regio, GRACIAS”.
Y bueno, el calor trae aparejada la TRANSPIRACIÓN. Cada vez que entro a un baño me miro debajo de los brazos para ver si tengo manchado en las axilas, y no sé para que lo hago porque no tiene mucha solución, sólo me preocupo de no levantar los brazos delante de otras personas, ¡que patético! jajajaja. He probado todo tipo de DESODORANTES para evitar mojar la ropa, pero no sirven de mucho. Una vez usé uno para hombre y como que transpiré tres veces más. (Ve en la página "TRANSPIRACIÓN" las soluciones que yo he encontrado)
Para que hablar de la DEPILACIÓN, terrible. Nunca he ido a un centro de depilación, porque me da pudor, sí, me da vergüenza sacarme la ropa delante de una desconocida y más encima mostrarle los pelos. He tratado de depilarme con cera yo misma, como que sólo me saco la mitad de los pelos y dejo un desastre en el baño. Así que opté por la rasurarme, se cumple el objetivo, pero muy suavecitas mis piernas no están que digamos. Pero como nadie me las toca...bueno, ese será tema para otro día...
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